Siempre que se realiza una actividad física el cuerpo pierde agua: cuanto mayor sea el esfuerzo físico, más cantidad perderá.
Toda persona necesita dos litros de agua diarios, sin contar que hizo en ese día actividad física. Por lo que si realiza un entrenamiento físico, deberá tomar en ese día más de dos litros. Siempre que se vaya a entrenar se debe llevar una botella de agua o alguna bebida que favorezca la recuperación de sales y minerales; y nunca hay que entrenar en un ambiente caluroso sin tener con qué hidratarse, porque en el caso de deshidratarse, correrá peligro la salud. En estos casos, en los que se entrene por ejemplo, en un gimnasio donde hace mucho calor o en un ambiente donde da el sol, conviene que el agua esté bien fresca y, en lo recomendable, beber de a sorbos.
Es recomendable también tomar agua cada vez que el cuerpo lo demande, es decir, durante el entrenamiento físico. No hay que dejar esperar a estar “muerto de sed”. El cuerpo es más sabio que cualquier experto en el planeta, si te está pidiendo ingerir un líquido, es porque lo necesita.
En cuanto a si, tomar agua o tomar una bebida para deportistas, es suficiente con tomar agua sola aunque es mejor una bebida que ayude a recuperar sales y minerales, especialmente si es un entrenamiento de alto esfuerzo, como bien se aclara, para deportistas.
